lunes, 4 de abril de 2011

HAGAMOS EXAMEN DE CONCIENCIA

Demostrado queda, la cultura cofrade, y me atrevería a decir la cultura en general, no interesa.El término cultura procede del verbo latino “coló” que significa cultivar. El interés por ella, equivale entonces, en cierto modo al deseo de cultivarnos, un deseo, que escasea en los tiempos actuales, basta con ver el escaso número de hermanos que acuden a las charlas de formación, a las múltiples conferencias, y las infinitas tertulias, donde los cofrades con capacidad crítica y conocimiento puedan dar sus opiniones con cierta validez y argumento.
Es necesario primeramente diferenciar conceptos, pues no es lo mismo cultura que información. La información se refiere exclusivamente a la posesión de una serie de datos que hoy en día están al alcance de la mayoría de los cofrades, sin embargo la cultura implica la capacidad para interpretar y elaborar adecuadamente esa información que llega hasta nosotros.

Pero claro está, depende del debate que se maneje, tenemos más o menos información, dígase ahora del “boom costalero”, todo el mundo parece estar perfectamente preparado y todos con capacidad suficiente para opinar con un criterio más o menos serio, pero ¿Hemos pensado que el término cofrade, o costalero, engloba mucho más? De quedarnos sólo en la técnica a utilizarse debajo de un paso, estaremos obviando el concepto espiritual que nos lleva a ello y otros muchos aspectos que derivan del mismo, como decía Ricardo de Córdoba “Es peligroso que la Semana Santa, pierda la fe”. Tenemos ausencias importantes de valores internos y cada vez más vamos por el camino del “folclore”, meramente como tal. Estoy segura de que son modas, por llamarlo de alguna macera “La túnica hoy en día no se lleva”, pero como llegó la moda del músico, el nazareno o el costalero,la pregunta es obvia ¿Llegará la moda de la formación?.

Está claro que es una opción libre en la que el cofrade participa o deja de hacerlo, de forma voluntaria en función del interés que le despierte y del grado de concienciación que lleguemos a trasmitir y todo ello viene enmarcado dentro de nuestro tiempo libre, que no es otro que el que dedicamos a las Hermandades. La fórmula está, a mi juicio, en no imponer y por el contrario proponer siempre, pero nos falta formación...y a veces ganas, y dedicamos muy poco tiempo a aprender, cuando debiéramos ser cofrades comprometidos y debidamente formados.

De nada sirve que las cofradías mueran todo el año, para resucitar en cuaresma, hay que ir más allá. Si observamos nos encontramos niños, que no conocen lo más básico de la fe, y sin embargo están bautizados, incluso han hecho la comunión, y creo imperiosamente necesaria la formación cristiana y cofrade, también para aquel bebé, que desde pequeño lleva colgada al cuello su medalla de Hermandad.

Seamos instrumentos sociales, a pequeña escala (demos ejemplo) y que la salida procesional sea la culminación de nuestra labor.

Hagamos examen de conciencia, la primera, esta que escribe.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La verdad es que tienes razón, de hecho en las charlas de formación del mismo XXV aniversario nunca asistieron más de 20 hermanos a todas ellas... será cuestión de modas, sin duda...

Nélida Prieto Fernandez dijo...

Mucho mejor enfocado y más edulcorado tu comentario en esta ocasión, ANÓNIMO... Te pediría que finalizaras con tu nombre una vez más, por la claridad y validez del comentario en cuentión y aludiendo a tu opinión, ciertamente fueron escasos los Hermanos que acudieron a estas charlas (te habla la persona encargada de organizarlas), como en la mayoría de Hermandades, por no decir todas pasa, pero si que dependió mucho del conferenciante o el tema a tratar, porque bien recuerdo que Juan Antonio Sánchez López, consiguió aglutinar a un número algo más elevado de Hermanos, (en ningún caso desmerecen el resto de conferenciantes, claro) incluso me atrevería adecir que tu estuvíste en ella, de ahí que sepas cuantas personas asistimos. Sin más agradecerte lo descafeinado de tu comentario para así no entrar en polémica. Y si en algún caso me equivoco, hágamelo saber igualmente con nombre y apellidos esta vez, muchas gracias.