domingo, 1 de diciembre de 2013

Fofucho Papa Noel

Mi regalo de cumpleaños.... no es él (Papa Noel) si no ella. La persona que me dio la vida. Fdo su hija. Nelida. Te quiero guapa

miércoles, 28 de agosto de 2013

GRACIAS..... (HUMILDAD Y PAZ DE PALMA DE MALLORCA)

Dicen que el Verano es para desconectar, descansar, hacer las cosas que no te permite la agenda apretada del trabajo, a Dios gracias... durante el resto del año y para todo lo dicho ha habido tiempo.
 
El último soplo vacacional, ha sido en gran parte gracias a la pareja más entrañable que he conocido (No por eso, Pep te perdono habértela llevado tan lejos  - aunque empiezo a quererte tanto como a Ella -), la misma que me mete en "historias" siempre agradables para mi y a las que no puedo decirle que no, porque entre otras cosas estoy para lo que me pida. De modo que además de pasar seis días inolvidables de playas espectaculares, pañales dificultosos, arroces exquisitos en puertos inmejorables, frases inolvidables como ¡no, no, no.... hombre! o días de rayos y truenos, aún queda tiempo para realizar una conferencia bajo el título "La Salud del Cofrade desde el punto de vista fisioterápico" y no olvidarme así ni de mi pasión por la Semana Santa y la costalería, ni de la devoción por mi trabajo.
 
 
En esta ocasión los oyentes residían algo más lejos de lo que estoy acostumbrada, concretamente en Palma de Mallorca y desde esta Memoria Costalera solo quiero agradecerles la hospitalidad con la que la Hermandad de Humildad y Paz me acogió, el interés de sus componentes por aprender la técnica del costal y preocuparse por su salud para fomentar la tradición. Desde aquí mi ánimo a todos sus hermanos, para que sigan sumando devotos y se hagan cada vez más grandes, si cabe. La humildad la llevan por bandera y es lo que más destaco de su gente.
 
Gracias a todos y suerte para el día 21. (Un guiño) y no olvidarse.... La Fe no pesa, ¿verdad Desi?.

miércoles, 24 de julio de 2013

“EL CAPATAZ” José Carlos Inés Pleguezuelos

Confundí o no (según se mire) durante mucho tiempo su apellido, a pesar de que el suyo lo dice todo... porque Carlos Inés solo hay uno en Granada (literal y real) y es “EL CAPATAZ”. Dotado de carisma, humildad, personalidad, llaneza, empatía y honestidad, fue capaz durante su mandato de hacer fácil, lo difícil, de enmarcar a la cuadrilla de la Cena como la más numerosa de cuantas pudiera haber en la ciudad hasta el momento.

Martillo y costalería eran una misma cosa para él y hablo con conocimiento de causa... En mi memoria, está presente, el recuerdo de los ensayos previos a la salida realizada el día del Corpus Christi. Como aprendiz de todo lo referido al costal y a la fisioterapia llegue a ésta cuadrilla, en primer lugar porque mi inquietud profesional y devocional, me llevaba a cada ensayo, para aprender desde la práctica y entre otras muchas, porque este hombre me llamaba poderosamente la atención. Me parecía que en el difícil mundo de la técnica del costal, viciada por la ciudad hispalense, y mal aprendida en la alhambreña, mostraba a cada paso la capacidad de reconocer y enmendar esos pequeños errores, de los que todas las cuadrillas que se iniciaban en este proceso sufrían y con todo eso, su perfección conducía a la acción y esto al cambio, aún así...no me cansaré de decirlo... “Las mejores ropas, siempre se vieron en la Cena”.
Marcó un estilo propio (mejo o peor, pero propio), creó distinción en el barrio del Realejo, consiguió inspirar a cuantos le rodeaban con el objeto de sacar lo mejor de ellos y sus habilidades comunicativas (porque habla poco, pero cuando habla, sienta cátedra), lo hacían un hombre cercano y sin alardes ni aspavientos, él hablaba y todo escuchaban sin más. Mi perplejidad era patente, por la atención que prestaban sus costaleros, por las lecciones litúrgicas que contenían todas y cada una de las frase que pronunciaba y por la seriedad con la que entendía su trabajo, su devoción.

Me consta que el protagonismo, lo quiere para el Señor de la Cena, de modo que se encargó de entrar y salir con prudencia y discreción, es más, de los muy pocos que se suman a las filas bajo el anonimato de un capirote. La afonía le ha echo grande, porque su labor intachable ha sido hablada y valorada, por otros.

Hace tiempo, aprendí algo de él, para mi muy valiosos: hablar de nosotros, es más importante que hablar de mi, o hablar de “yo”.

Es curioso, pero no tuve la suerte durante su mandato de conocerlo en persona. Hasta hace pocos meses que por casualidad alguien se chivo de mi opinión acerca de él. Hoy puedo decir que su capatacía, decía todo de cuanto es como persona y que su mujer a la que mando un beso enorme desde aquí, le doy mi enhorabuena, por sobrevivir a un alto club de fans encubierto, que se dejaba ver cada año a las puertas de Santo Domingo, o entrada a Catedral (un guiño, María Jesús) y en este caso mucho me temo, que era por otras cuestiones más estéticas que profesionales.

*Tienes que dejarte fotografiar más, Carlos. Porque no he encontrado nada adecuado para la entrada al blog.

*Existen otros muy buenos capataces en Granada... Que conste que también lo pienso

martes, 23 de julio de 2013

COSTALERAS

El primer aplauso, se pierde en el despejado espacio que deja entre ver su imagen. El crucificado al que hoy le rezan sus vecinos de Cruz de Lagos, se alza un año más, golpeado previamente por las inclemencias del tiempo, que a modo de lluvia, ponen a prueba la resistencia artística de dicha imagen.

Al mismo tiempo, treinta y seis personas aguardan protegidas bajo un faldón, lleno de amor. La talla, en este caso del respiradero derecho deja entre la plata, enfocar la mirada para no perder detalle. La persona que ocupa el zanco del mismo lado, asoma la cabeza discretamente en la todavía intimidad del recinto, para ver alejarse el escaso dorado que le permite su vista y las que ocupan la delantera del paso, susurran que el Señor de la Lanzada está en la calle. El resto, se conforma con la magia de otro sentido, con el que somos capaces de imaginar la grandeza del acto; es nuestro oído en este caso, el encargado de contarnos la historia que comienza....

Salida del Palio de la Caridad...Martes Santo 2013

La primera levantá implica la tensión del momento y fuertemente se alza al cielo, provocando el primer sonido del “palio rojo” (este año sí), aludiendo a la sangre que brota del costado del Señor. El golpe de varal con la cañonera y el eco que se produce entre las maderas, impresiona a muchos que creen haber escuchado bien, la voz del capataz dirigiéndose hacia una mujer y no correspondiendo dicha fuerza con el género.

¡Y si!, son mujeres costaleras, caderas entalladas que inevitablemente marcan la cintura de una fémina bien fajada, al cuello una medalla y la coquetería siempre patente en forma de pulsera, con una frase muy característica de esta cuadrilla: “Costaleras de tu Caridad”, el paso elegante a la par que contenido, de una pelvis cuya morfología está diseñada para lo más bello, dar vida y la devoción por bandera, como no podía ser de otra manera, a la Madre de Dios.
La derecha por igual, es la primera orden bajo los toscos toldos blancos que protegen al paso, al compás de una mecía musical bambalina y varal, hasta encuadrar los cuatro zancos delante del barrio.

La voz de mando lo tiene claro: “Señoras, ¡vamos a repartir Caridad!”.

Estampa inusual que contrasta con el recuerdo melancólico del enlutado color negro con el que se dejaba ver esta imagen años antes. Cromatismo actual, que identifica a la advocación como la más importante virtud teologal y que engrandece de forma estética un proyecto que empieza a verse en su globalidad.

Da comienzo el ritual de sentimientos, que a lo largo de catorce años (los que llevo perteneciendo a esta cuadrilla, y hablo de experiencias personales) se ha tejido cuidadosamente en esas benditas trabajaderas. Auténticas ceremonias del esfuerzo, con adosados hombros y vecinas fuerzas; silencios que han hablado por sí solos, omisión del trabajo bien hecho, frases que quedaran para la historia, porque la cuadrilla de las ratonas al menos, tienen bien aprendido que “La fe no pesa”. Admiran de sobra la penitencia de la mantilla, pero se niegan a renunciar a sus fajas y a sus zapatillas, (frase mítica del pregón del costalero, pronunciado por una apasionada de su Virgen). Y no se olvidan que “Por Ella y con ella siempre”, es el legado del que dirige el palio del amor, en recuerdo al fallecimiento de un ángel, que aún guardo en forma de relevos, en la funda de mi cámara de fotos; pues no encontré mejor sitio para inmortalizar el recuerdo, de esta memoria costalera.

Hilván y costura para zurcir una bata de cola, que con el impulso de dos niñas fue suficiente para ver un deseo cumplido y que hoy destaca poderosa, en la intimidad de la oscura trasera. Desde ese día el izquierdo se marca con un ole siempre, costaleras de volantes y andar flamenco, entendida esta forma, como sentimiento y arte. Costaleras costureras del amor hacia una Madre, capaces de tejer su primera chicotá al compás de Caridad del Guadalquivir.

Saben que es el momento de contener emociones, de aliviar tensiones, y disfrutar; porque es el momento de pasarlo bien, de demostrar el trabajo de cada ensayo y de recrearnos en el buen hacer costalero. Mano a la zambrana y muy corta la mecía, con esa información es suficiente, porque ellas ya saben como y de que manera lo tienen que hacer.

Y asomando ya el primer varal, Caridad está en la calle, para dar al necesitado, para ser el rezo del mayor y el asombro del pequeño, para ser sonrisa de la cría que debuta de aguaora, para calmar el desconsuelo del familiar del enfermo, para ser alivio de la angustia y desesperación del momento.... Para ti.. que tanto soñaste ser costalera de la Madre de Dios...

Gracias a todas y cada una de las personas que componen la cuadrilla Virgen de la Caridad que hace que cada momento sea mágico, único. Gracias por escribir el libro de frases célebres de esta ratona cuadrilla. Gracias por estar y recordar, no sois vosotras quien la elegís a Ella, es Ella quien os ha elegido a vosotras.

* La inspiración, de un carnavalero, cofrade y amigo Abuin, bajo la oscuridad del faldón. Entrada dedicada a las costaleras de la Caridad.

jueves, 16 de mayo de 2013

ROZANDO LO ABSURDO

En granada tenemos únicamente lo que merecemos. Me molesta enormemente tener que escribir esta entrada, incluso me da rabia tener que publicarla, pero creo que es de ley a pesar de que alguna mujer pueda o no entenderla. Intentaré ser clara y no ofender a nadie, siempre con la disculpa adelantada en caso de hacerlo.

Las mujeres hemos conseguido mucho en el ámbito de la Semana Santa de esta ciudad. Paso a paso, hemos logrado ganarnos el respeto de muchos hombres, que no creían que las mujeres fuésemos capaces de... y mucho me temo que después de haber subido escalón a escalón hasta conseguir un sitio privilegiado gracias al esfuerzo, la dedicación, el tesón y porqué no defender los derechos de igualdad en esta bendita tradición, llegamos un día, dígase igualá del Corpus y echamos por tierra lo que tanto trabajo nos costó alcanzar.

Rozamos lo absurdo, la tontería, las malas formas, y creamos derechos huérfanos de sentido común.

Queríamos ser nazarenos... y lo somos, hermanas mayores... y las tenemos, acólitos... y se nos ve cada Semana Santa, costaleras... pioneras en Andalucía y en ello seguimos trabajando y con todo hemos demostrado ser igual de válidas. Me pregunto ¿Aquí... que se pide Señoras? ¿Ninguna de las féminas ha querido portar la Santa Cena? A mi me hubiera encantado ¿Porqué ninguna se presenta a la igualá del Huerto, o el Perdón?, misterios de estética impecable... a mi no me gustaría en absoluto que a la igualá de mi Virgen se presentara ningún hombre. Sacaría las uñas y mordería el palo si hiciera falta.

Por defecto, en pocos estatutos (que yo conozca en Granada, dos) no se especifica el sexo del portador del paso, en algunos casos porque ya se daba por entendido y en otros más actuales porque el sentido común dicta perfectamente, que no debe haber diferenciación en el siglo en el que vivimos.

Pero, no contentas con todo, nos dirigimos a la igualá del Santísimo, con lo que ello significa liturgicamente. Exigiendo derechos cuando hay personas que llevan esperando portar dicho paso cinco años, con el compromiso de un capataz que le guste a quien le guste, es histórico en Granada y al que se le debe el éxito de costaleros que a día de hoy es capaz de mantener y sumar (sin saber las consecuencias a nivel eclesiástico que podemos ocasionarle) y lo que es peor, forzando una situación que por desgracia nos pone en boca a todas las mujeres costaleras, a pesar de ser una minoría quienes se presentan con el pecho bien alzado exigiendo igualdad en algo que católicamente desconocen, con todos mis respetos.

Derechos, todos... apoyo a la mujer, como creo que nadie (permítanme que lo diga), pero creo que este acto ha sido sin lugar a dudas, el que ningún fundamento tiene, el menos afortunado de los hechos hasta ahora y estoy segura que no es otra cosa que fruto del desconocimiento y por contra la aplicación de un “poder” que en ningún caso nos compete.

Es mi humilde opinión, y no es mi intención ofender a la mujer en el ámbito de la costalería, capaz de portar pasos como un hombre teniendo en cuenta diferencias morfológicas, fisiológicas etc... lo que manifiesto es que (si las fuentes son veraces), la casa no se empieza nunca por el tejado, existen otras formas, otros métodos, para finalmente portar al Santísimo si eso es lo que realmente se pretende, aunque no esté de acuerdo con ello.

Y otra cosa, yo me considero COSTALERA... no necesito más que mi Virgen de la Caridad. ¡No se si me explico! Pero a buena “entendedora” pocas palabras bastan... no creo que sea “El Santísimo” lo que nos lleva a todo esto. Lo siento.

miércoles, 3 de abril de 2013

EN GRANADA SE PIENSA CON EL CORAZÓN

El Cecop, ha sido desgraciadamente el gran protagonista en cuanto a la meteorología se refiere de nuestra Semana Santa de 2013 (quedan atrás viejas páginas web aeropuerto de granada u otros... este novedoso sistema, dio con todas y cada una de las predicciones, minutos arriba o abajo) y digo desgraciadamente, porque a pesar de desear con mucha fuerza, que luciera el sol en estas fiestas, la lluvia nos ha ganado el pulso ¡y de qué manera!.

Queda claro que las Hermandades han tenido una difícil papeleta que resolver, pero a mi juicio, se ha pensado más con el corazón, que con la cabeza. Suelo ser bastante empática (poniéndome en el lugar del otro) cuando realizo mis comentarios en este, mi blog, pero hoy voy a ser coherente con lo que pienso y plantearé verbalmente las actuaciones que creo desafortunadas, y de las que he sido testigo, siempre desde la crítica más constructiva.

La mayoría de los cofrades y granadinos hemos estado pendientes del cielo, más que nunca, a la espera radiofónica o televisiva, de fumata blanca, salgo a la calle; fumata negra, me quedo en casa.

A mi juicio es inconcebible errar tres veces en una misma salida de penitencia, pedir alto y claro “¿calma!”, antes de salir a la calle porque se está seguro de que va a llover, permitir nazareno y acompañante con paraguas y brazo alzado como única protección, y mantener recorridos a pesar de las tempestades... inconcebible con todos mis respetos

Plásticos “de pintor” para “cubrir” las imágenes que manejaba el viento a su imagen y semejanza, o más fuerte aún, sin ellos, por esto de ganar tiempo (o no), regodearse en el trabajo costalero entrando en Ganivet mientras la barba del señor sirve de guía para la lluvia incesante de ya más de dos horas continuadas, o la mantilla calada hasta los huesos bajo tres capas de ropa.. inmaduro en cualquier caso.
Locuras en los cortejos, ahora salgo, ahora no, ahora me vuelvo, ahora hago el calcetín, o la espantada... pasos en la calle que anteriormente le habían perdido el respeto a la lluvia, o regresos solitarios en el mejor de los casos... intolerable por lo que puede conllevar
Una desvirtuada Semana Santa, que en ningún caso ha servido para lo que está concebida, o al menos en los casos que refiero.
Creíamos que teníamos una Semana Santa de altura, responsable con sus decisiones, madura, y no me queda más que pensar y refugiarme en que ha sido una mala decisión, o dos o tres, o.... y que de ello aprenderemos, por la conservación de nuestras imágenes y su valía, y sobre todo y más importante por la cantidad de personas, que todavía hoy curan pulmonías, resfriados, o sencillamente malas experiencias, que se podían haber evitado.

Protección, madurez, sensatez y cabeza (que no corazón) es lo que lanzo desde aquí, para que esta semana ocupe el lugar que se merece, para que la imaginería, la talla, la persona, el niño, el anciano, nos dure el mayor tiempo posible y seamos capaces de conservar nuestro patrimonio y llevarlo a la máxima expresión de fe, en el procesionar siempre digno.... Con dignidad.

jueves, 21 de marzo de 2013

A TI, JUAN... POR TUS ÁNIMOS PARA LA CONTINUACIÓN DE ESTE BLOG

Una Taberna “Antigua” cuyas paredes actuales, esconden numerosos secretos cofrades... de donde cuelgan imágenes cercanas en forma de fotografías, algunas de ellas con un contenido estético y sentimental que no puedes apartar la mirada, por lo que trasmiten y por lo que te hacen revivir y una tertulia de amigos, de esas que surgen sin darte cuenta en tiempos de cuaresma.

Lo decía un hombre al que aprecio y creo prudente a la par que sabio, conocedor de la teología y sabedor por su profesión, de lo social, un maestro de palabra humilde y capaz... Capaz de comentar una frase, que hoy me hace reflexionar y compartir, con mis lectores; y que decía: “La Semana Santa de Granada es una estructura gigante, con los pies de barro”, y comentaba seguidamente, es necesario, invertir el orden y no comenzar la casa por el tejado, porque corremos el riesgo de un inmediato fracaso.


Me planteo, si el camino que estamos cogiendo Hermandades y cofrades, es el acertado o por el contrario, estamos olvidándonos de crear una columna vertebral, capaz de sostener estructuras, como las que hablábamos de forma metafórica.  Posiblemente el pilar fundamental que mantiene esta fiesta, se esté dejando en el olvido siendo lo ostentoso, aquel reclamo con el que llamamos al cofrade.
En los últimos tiempo hemos querido sumar hermanos, con la que yo llamo, riqueza patrimonial, hemos intentado llegar al fiel, con bordados magistrales,imaginería contemporánea, pasos de enormes dimensiones, bandas de prestigio etc... Y no me parece mal porque forma parte de esta fiesta y engrandece en todos los sentidos nuestras creencias y por qué no decirlo nuestra tradición y cultura. El problema viene cuando centramos todo el tiempo, en financiaciones imposibles, trabajo agotador de búsquedas de actos que generen economía a la hermandad y esto implica un magnánimo esfuerzo por parte de muy pocos y creo que ahí nace el problema...

 Los grandes proyectos, son posibles cuando existen muchos granitos de arena y en Granada por desgracia no es así. Las Hermandades por lo general, no gozan de nóminas de hermanos poderosas, y los implicados son muy pocos. Cuando inicias proyectos de envergadura, donde la implicación de esos pocos es muy intensa surgen “como en toda comunidad de vecinos”, roces personales que vuelven de nuevo a restar. Todos comenzamos tirando de la misma cuerda, y acabamos en un “tira y afloja” dividido en dos extremos, que incluso perjudica de tal forma, que la cuerda en cualquier momento puede llegar a romperse.
Existen Hermandades con patrimonios importantes pero que al mismo tiempo pasan verdaderas calamidades para sacar un cortejo digno e incluso algunas cofradías llegan a pagar para poder sacar determinadas insignias.
 
Es necesario hacer Hermanos, a través de los directores espirituales, de la suma de esfuerzos y voluntades por crear un ambiente agradable, el saber acoger y mantener al que inicia su andadura cofrade, el sentirnos al mismo nivel sin cargos absurdos, protagonismos inmerecidos, ni propiedades sin sentido... Porque está claro que la estética juega un papel importante en el crecimiento de las Hermandades, pero estas grandes cosas son sustituibles y para nada prioritarias, los Hermanos que componen las corporaciones por el contrario si lo son. Que no se nos olvide Sin Hermanos no hay Cofradías. Es la necesidad de un esfuerzo común y social, con las personas que nos rodean, “envenenarlos” de esta bendita locura, acercarlos a esta tradición, sumar, sumar, sumar, sumar,  y seguir.
Se me ocurre, animar a los más pequeños, a los grupos jóvenes, y el de la Lanzada por Bandera. Los pequeños de hoy están llamados a ser el futuro de las cofradías. Sería interesante llamar a las aulas (en Cádiz el Hermano Mayor de la Santa Cena visita los colegios para someterse a las más ingeniosas preguntas, o la Hermandad de las Aguas, la cual realizan exposiciones y charlas explicativas para los pequeños). Podría ser una manera de acercar la Semana Santa al pequeño cofrade y seguro que hay muchas más...

Como siempre digo, las hermandades las hacen grandes los hermanos y recuerda muchos granos de arena forman una gran montaña.



lunes, 18 de marzo de 2013

AL MAL TIEMPO, BUENA CARA

Empiezan las miradas al cielo, intentando adivinar los designios del tiempo sobre la que es, para muchos, la semana más importante del año.
Son días en los que los cofrades, no hacemos otra cosa, que no sea mirar el tiempo apoyándonos en las nuevas tecnologías los más jóvenes o fiándose de cualquier modo del hombre del tiempo de la “1ª” en el caso del más longevo... lo que viene a ser una auténtica locura, y verán...
El móvil de unos cuantos asegura con dibujitos inclusive de nubes en movimiento y un sol fijo  confirmando al 100% que el Martes Santo, a falta aún de siete días, las probabilidades de lluvia son mínimas, mientras el resto de páginas web, avisan de que la semana vendrá pasada por agua y en todos los casos, recomiendan utilizar paraguas (a todos los efectos contrario a cualquier cofrade) y chubasquero

Por otro lado la vecina del tercero comenta eufórica: “Anda, te vas a librar, porque he escuchado en antena tres, que el Domingo de Ramos en Granada no va a llover”, a la par que te contentas por tan feliz noticia, te preguntas “¿Donde habrá mirado esta mujer el tiempo?, es más, aún no se ha enterado después de catorce años que yo salgo de costalera el Martes Santo”.

El vendedor ambulante observa el cielo y la experiencia le dota de saber el estado meteorológico aunque se sienta expectante por saberse afortunado o desgraciado bajo el techo “que Dios quiera”. El confitero echa cuentas, de cuantas torrijas le caben a la semana santa con lluvia y sin turismo,  mirando al mismo tiempo como las nubes juegan al escondite en días venideros a la par que cruza los dedos y el dueño del hotel, desea saber las inclemencias del tiempo con el fin de anteponerse a las posibles cancelaciones, pidiendo que de aparecer la lluvia, sean en días laborables y no en festivos. (“Siempre solidarios”).

El cabreo va creciendo a medida que se acerca el día, y mucho más si el familiar de turno, tiene tierras, o labra el campo, o sólo se le ocurre decir, “Niña, déjate de Semana Santa que hace mucha falta el agua”, a lo que por "bajini" contestas “por mi como si llueve todo el año, pero del Viernes de Dolores al Domingo de Resurrección que salga el sol en toda Andalucía, no te digo yo…”.

La costalera que sale por primera vez, al igual que el niño que estrena traje, lo tienen claro, el Martes Santo no llueve de ninguna de las maneras, en el primer caso porque le ha llevado huevos a las clarisas y según las cabañuelas, los cielos estarán parcialmente despejados y en el segundo, su madre se lo ha garantizado (cualquiera escucha al niño, todo el día, dale que te pego con la lluvia y la Semana Santa) y eso va a misa.

Y es que nunca llueve a gusto de todos, porque el padre que ha castigado al niño con no salir en la hermandad por traer malas notas, reza en este caso, porque llueva y sirva para algo el castigo, ya que el año pasado le ocurrió y encima el niño se bofó del tema.

El aeropuerto de Granada es para volverse loco, aumentan las llamadas por momentos, la centralita echa humo, pero no precisamente para reservar vuelos, aunque las cosas pinten, como para irse a palma de Mallorca (un besito Desi), a ver cofradías, que también las hay por esos lares.

Los abuelos, con tal de verte feliz, recurren  a refranes y supersticiones banales, que en ningún caso coinciden con la realidad y es entonces cuando llega el bucle de melancolía, la desesperanza y la frustración y te agarras al pinganillo, como si de un tesoro se tratara para escuchar acerca de un tema, sólo un tema, el tiempo.
 En fin… Esperemos después de haberle dado un toque “de humor” al artículo, que la lluvia inmisericorde escape de esta Semana Santa 2013 y todo el mundo comience a mandar sus plegarias al cielo, para que sea posible realizar estación de penitencia en todas y cada una de las Hermandades.

lunes, 11 de marzo de 2013

MARTILLO

No podía ser otra su definición...  herramienta de percusión utilizada para golpear directa o indirectamente una pieza.
 
No en todos los casos, pero en un elevado tanto por cierto, aparece el síndrome de "Tengo el martillo, tengo el poder", normalmente al poco tiempo de poseer esta herramienta y para otros muchos cofrades es el único y obsesivo sueño en su quehacer diario dentro de sus hermandades. No se sienta nadie aludido, más que el que lo pretenda o se sienta reflejado, que yo aquí ¡No nombro a nadie!
 
Lo de "Erase un hombre a una nariz pegado", cambia eficazmente en el mundo cofrade si sustituimos nariz por martillo. Parece que poseer este cargo, a mi juicio difícil y arriesgado y por su puesto valiente, significa obtener una varita mágica a modo de ilusionista con poderes suficientes para transformar, aparecer  y hacer desaparecer todo cuanto se antoje. Trucos que bajo mi punto de vista terminan por descubrirse. 
De modo que no creo que tener un martillo cofrademente hablando, implique en absoluto, golpear a diestro y siniestro con el único fin de hacer daño, olvidándose de lo que se tiene entre las manos y sin hacer honor a lo que llevas delante. Sólo unos pocos están a la altura, sólo unos pocos crean cuadrilla, sólo unos pocos valoran el trabajo y el esfuerzo costalero, sólo unos pocos sufren con los que sufren debajo, solo unos pocos son humildes y leales y por todo sólo unos pocos son de verdad CAPATACES (con mayúsculas)
 
Y digo esto, porque he visto con mis ojos, ese sentimiento de superioridad y preponderancia, y por desgracia cada vez más y más. En Granada hay y ha habido grandes capataces que quizás técnicamente no han sido todo lo buenos que debiera, o sí, pero que por el contrario han derrochado humildad, han demostrado querer aprender, han sabido corregir cuando han errado y abrir los brazos cuando los suyos lo han necesitado, han sabido inculcar valores y lo más importante han tenido actitud y disposición.
 
Por otro lado, martillo y trabajadera parecen estar tremendamente unidos, hasta tal punto que cuando se llevan "x" años debajo del paso, el siguiente objetivo se convierte en un extraña ocecación por formar parte del cuadro de capataces y un éxito rotundo si se está como capitán del navío por sentirse absolutos protagonistas de una historia, donde la gloria de la fe ya se alcanzó. Una obsesión que se lleva amistades y otros muchos valores a su paso.
 
Ser capataz debe ser algo merecido y en ningún caso un regalo de cumpleaños y bajo mi punto de vista, este cargo debería de proponerse cada año y demostrar para resolver adjudicaciones eternas, y por el contrario trabajar en el cargo de cara a cada Semana Santa.  

jueves, 7 de marzo de 2013

NO MAMA, QUIERO FAJA Y ZAPATILLAS...

Todos lo hacemos... en alguna ocasión hemos podido manifestar, tanto en medios cercanos y familiares como en sitios públicos, lo mucho o poco que nos gustó el pregón de tal o cual persona, sin pararnos a pensar, al menos a mi juicio, que en primer lugar, como dice el refrán "para gustos, los colores", y en segundo lugar, todas y cada una de las vivencias cofrades son diferentes y bajo mi punto de vista, ninguna mejor que la otra. La forma de interpretar la Semana Santa o las experiencias bajo los pasos,  no son de ninguna forma criticables, a menos que ejerzas como poeta o escritor y opines de la materia, mientras tanto a mi por lo menos, ¡No me vale! y mucho menos si la intención es hiriente y ofensiva.

Dicho esto, creo que este tipo de oratorias, llega al publico en el sentido de verse reflejado en alguna de las cosas que el pregonero cuenta, cuando ves que alguna de sus experiencias se parece a lo que tu has vivido y pellizcan el corazón de tus sentimientos sin darte apenas cuenta. Pues bien, no voy a valorar en este caso si el pregón del costalero del Zaidín de 2013 fue mejor o peor, si tuvo buena o mala métrica, si estuvo lo suficientemente exaltado y llegado al publico o si por el contrario existieron más elementos externos de lo debido, lo que si voy a hacer hoy desde aquí, es darle una palmadita en la espalda y las gracias cuanto menos, a una compañera de trabajadera, por atreverse ese día a contarnos su historia,  como llegó a ser costalera, lo que supuso para ella entrar en la cuadrilla de "las ratonas" y llegar mucho más lejos, pidiendo delante de todo el mundo, a pesar de su timidez, ser costalera "por toda la eternidad".

Contar a modo anecdótico, algo que me hizo "mucha gracia", y con la que me sentí identificada y creo que a la mayoría de las mujeres de mi generación (porque me estoy haciendo mayor) nos ha ocurrido alguna vez o en algún coloquio ha sugerido el tema.., a muchas de nosotras, alguna vez nos han propuesto la mantilla y poniendo en el lugar que se merece a esta forma de estacionar, para mi la más sufrida sin lugar a dudas, hemos contestado, ¿yo? que va, mama... yo lo que quiero es una faja y unas  zapatillas... Creo que la mujer que hoy día se mete debajo de un paso, lo hace con la mayor de las devociones cofrades y costaleras, ¿porqué no?. Me dejó sorprendida gratamente, la sencillez con la que definió la figura del costalero poniendo el anonimato por bandera y desechando todo aquello que requiera protagonismo, porque lo tiene claro, los protagonistas, son Ellos.


Me faltarán probablemente muchas más de las que ahora nombre, pues hablo de una escasa trayectoria de catorce años portando a María Santísima de la Caridad, pero en este corto espacio de tiempo han pasado al menos 4 mujeres costaleras de este palio por el atril del pregón del costalero del Zaidín: Inma Franco, Margarita Pérez, Sonia Orantes y una servidora, sólo por ello, y excluyéndome en todos los casos, por el esfuerzo que le han dedicado, por el amor que han puesto al escribir la oratoria, y por la valentía de contar lo que cada una ha considerado, deberíamos estar orgullosos, y no una vez más desmerecer, sencillamente porque sí.


¡Señoras!, como siempre digo debajo del paso.... "La fe, no pesa".


 




jueves, 21 de febrero de 2013

¡TE LO PROMETÍ!

Con toda seguridad, para la gran mayoría de los cofrades comprometidos, las hermandades y todo lo que rodea a las mismas son, una forma de vida. Empiezas minimamente introduciéndose en este mundo y acabas inmersa hasta límites que nunca hubieras sospechado. Ha sido mi caso.

 
Y hoy puedo decir "ha sido...". En muchas ocasiones, dedicamos el tiempo que ociosamente podíamos dedicar a la familia, la pareja, los amigos, nuestras aficiones, claro está, que en la mayoría de los casos, dichos factores, también se encuentran en este círculo cofrade. Pero la cosa se complica cuando el trabajo, gracias a Dios, u otros motivos personales, reclaman ese espacio que hasta ahora habías dedicado a las Hermandades. En muchas ocasiones he creído que me robaba más tiempo del que debiera, hasta plantearme y dudar acerca de si tenía que esperar, continuar, descansar o abandonar. Esta última opción fue en un principio, implanteable y luego necesariamente inminente. Lo  que me dio fuerzas fue pensar que lo importante es no ver  la retirada como un fracaso, sino como un cambio momentáneo y el cual para nada cambiaría mi forma de pensar y sentir, tan solo un planteamiento de mera implicación.

A toro pasado, tengo sentimiento de añoranza, la sensación de información tardía, o incluso echo de menos círculos amistosos y afectivos que en su momento fueron importantes para mi. Pero como se suele decir, la vida da muchas vueltas, y en mi vida así ha sido...

He encontrado a la persona con la que quiero compartir el resto de mi vida, del que estoy plenamente enamorada y al que juré amor eterno a las plantas de sus titulares ( no todo lo podía elegir yo, je, je), en un bellísimo como no podía ser de otra manera, 15 de Septiembre  y digo bellísimo por todo lo que ese día fue para mi y lo que significó para nosotros. En días próximos y en el del enlance, supe lo importante de estar rodeada de gente que te quiere y entre todos no me olvidé de los míos, Lanzada y Caridad.



Ellos me han hecho amar la Semana Santa y ver cuales son las cosas buenas de esta fiesta y gracias de algún modo también a ellos hoy estoy felizmente casada, con el que ojalá pronto sea el padre de mis hijos.



¡¡¡¡¡Te lo prometí!!!!!